Los desastres naturales. ?Obra de Dios o del ser Humano?
Frente a la tragedia ocasionada por el temporal que sufrimos los salvadore?os en los primeros d?as de octubre, vemos m?ltiples declaraciones de la gente sencilla, que ha perdido sus pertenencias, se?alando que ?Dios sabe por que nos ha mandado estas tragedias?. Incluso el propio Presidente de la Rep?blica se refer?a al fen?meno se?alando que Dios nos manda estas pruebas para probar nuestra voluntad como salvadore?os.
Bueno es Dios que nos nos ha matado Pareciera que al final todo lo sucedido es obra de Dios, es su voluntad. Por tanto los seres humanos, mortales e imperfectos, no tenemos mas remedio que aceptarlas. Es Dios el que ha decidido que miles de casas sean arrastradas por las correntadas de los r?os desbordados. Es Dios el que decidi? que otros miles tuvieran que abandonar sus hogares ante el peligro de deslaves. Es Dios el que hizo que se inundaran las casas de los barrios tradicionales del centro de la Capital.
Al responsabilizar a Dios, nada podemos hacer los seres humanos, salvo rezar para que estos fen?menos no vuelvan a ocurrir.
Aparte del problema teol?gico, que esta forma de pensar acarrea, que ve un Dios que castiga, que nos manda dif?ciles pruebas. Distinta de un Dios que es amor, que es compasi?n infinita; est? escondida una trampa.
La trampa consiste en dejar sin responsabilidad a los seres humanos ante los hechos. Con esta l?gica, los constructores de viviendas en zonas de alto riesgo, no son responsables. Los que han depredado la Cordillera del B?lsamo, no son responsables. Los que no previeron el colapso del sistema de recolecci?n de aguas lluvias de la Capital, no son responsables.
Al responsabilizar a Dios, por mandar las lluvias, exoneramos a los verdaderos responsables.
Los verdaderos responsables de que varias colonias en la Cordillera del B?lsamo sean de alto riesgo, son los que depredaron la cordillera para construir urbanizaciones, son los que despu?s de los terremotos del 2001 no construyeron las obras de mitigaci?n de riesgos.
Muchas de las inundaciones del bajo Lempa son resultado de las descargas de agua que se hacen en la presa hidroel?ctrica. De la ausencia de bardas de protecci?n, que nunca se construyeron a pesar de que al parecer fueron donados los fondos por el gobierno japon?s.
- y si en invierno se inunda?....
- Hechemosle la culpa al Se?or.... Por otra parte, est? la situaci?n de extrema pobreza. La gente vive a las orillas de los barrancos y quebradas, no porque les guste, si no porque no tienen otra alternativa. Estos salvadore?os han sido privados de su derecho a una casa minimamente digna en un lugar seguro. Sobreviven a duras penas en las orillas de los barrancos, sin empleo, sin asistencia m?dica, sin servicios b?sicos.
Por ello cuesta mucho convencerlos de que desalojen, pues no tienen a donde ir. Porque temen perder las pocas pertenencias que con tanto esfuerzo han logrado adquirir. Por ello prefieren correr el riesgo de morir, antes que desprenderse de lo que con tanto sacrificio han logrado.
Desde que este per?odo de lluvias comenz?, hemos venido se?alando en Hunnapuh que el sistema de recolecci?n de aguas lluvias de la Capital est? colapsado. Ya no tiene capacidad de mover las cantidades de agua, cada vez mas crecientes que generan las nuevas urbanizaciones. Esto lo sab?an los t?cnicos del gobierno y de las municipalidades del gran San Salvador, pero todos se pasaban la pelota unos a otros. Al final nadie ha hecho nada para resolver tan complejo problema.
Como podemos observar, son los seres humanos los principales responsables de las tragedias que hemos vivido. Es la ambici?n de tener ganancias lo que lleva a destruir la naturaleza. Es la falta de planes de previsi?n para enfrentar estos fen?menos naturales. Es la ausencia de planificaci?n en el crecimiento de las ciudades. Es el desorden en el uso del territorio nacional. Es el modelo econ?mico, concentrador de riqueza y excluyente de las mayor?as.
Es en lo anterior donde podemos encontrar los responsables de las tragedias que hemos vivido.
Con este comentario no pretendo asumir la defensa de Dios, ni creo que necesite que lo defienda.(adem?s ni soy abogado). Simplemente pretendo generar una reflexi?n diferente que nos permita poner los pies sobre la tierra. Solo si asumimos la parte de responsabilidad que nos corresponde, podemos tomar las medidas para corregir.
Todo parece indicar que en los pr?ximos a?os, vamos a tener fen?menos similares. Los climas en el planeta est?n cambiando, lenta pero inexorablemente. El riesgo aumentar? al final del per?odo de lluvias (entrada del oto?o), cuando las ondas fr?as del polo norte comienzan a bajar y se vuelven muro que detiene los huracanes en su ruta hacia el norte. Estos se pueden quedar rondando la regi?n mesoamericana.
No pretendo ser profeta de desastres pero en los pr?ximos a?os, los riesgos a partir de finales de septiembre ser?n altos para nuestros pa?ses (Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala y Sur de M?xico). Es nuestra obligaci?n prevenir, para minimizar las perdidas materiales y evitar las perdidas de vidas humanas.
Ojal? reflexionemos y actuemos a tiempo.
Ayutuxtepeque, Mi?rcoles, 12 de Octubre de 2005.